Riete de Tí
- Merme
- 24 jun 2018
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 6 jul 2018
La adaptación, a través de la sonrisa.
Llegar no fue nada fácil, pero me las ingenie para ir cumpliendo los planes que traía.
Uno de ellos era anotarme en un taller literario. Así que volvi a la librería de siempre a consultar.
Es muy particular, tienen tantos libros en tan reducido espacio que no entran mas de dos personas por m2, alcanza para que al abrir la puerta pases y al cerrar quedes adentro. Cuando salís, puede pasar otra persona y solo una a la vez. Pedis tu libro y ellos la recorren, solo cabes en el lugar que ocupas y con los brazos juntos, nada de poder señalar algo.
Les pregunte si me podían recomendar un taller literario en Ballester, pero no conocían, asi que compre mis libros y al intentar salir, la persona que seguía en turno me habló;
- Perdóname que escuche, es que es tan chiquito. Yo conozco a alguien, se Llama Nelly Vargas Machucha* ella tiene un taller muy bueno, “El Caldero” esta en Chilavert. Te doy su dirección, no me acuerdo su teléfono.
[Cuando algo me sorprende, me quedo muda y helada.]
- …
- …
- Gra… cia … s
La señora entro y yo quede sola en la vereda.
Reaccione mientras caminaba, camine un poco mas rápido, otro mas y termine al trote llegando a casa, cache la bici y me fui a buscar la dirección.
Llegue y el número no existía, asi que toque timbre en un gran jardín con un cartel en madera que decía, “El Caldero”. Nada podía fallar, salvo mi idiotez.
Abrió Nelly la puerta y yo sin bajarme de la bici y como un mono, sacándose los piojos y hablando un ingles tehuelche dije;
- ¿Acá enseñan lengua?
Nelly contesto entre risas;
- No, es un taller literario.
Se acerco a mi riendo (era espectacular, brillaba) y hablamos como si me estuviese esperando.
Me conto como era el taller y que no tenia lugar, pero si quería podía ir los Martes para hacer una prueba. Quizás se hacia un huequito, quien sabe.
Quedé (aunque mucho no se note) y fueron los meses mas hermosos de mi vida, recuerdo comenzar a escribir un cuento en el que todo el mundo había perdido la cabeza y en su lugar tenía un espejo. Pero cada uno pensaba que el otro había perdido el rostro porque se veía reflejado, una locura. Nunca lo termine y sigo pensando en ello.
Como les contaba, llegue en Septiembre y no fue fácil. Automáticamente empecé a trastabillar en todos los ámbitos, amor, trabajo, salud todo.
En Navidad, me encontré con un ex compañero de la primaria en una fiesta, no lo reconocí, pero el si y nos pusimos a hablar (era obvio que uno gustaba del otro cuando éramos chicos) termino la noche, no le pedí su teléfono, ni su mail ni nada. Solo nos saludamos como ex compañeritos y adiós.
Volvi al mismo lugar una semana después, en Año nuevo y el también, cuando nos encontramos nos reímos y confesamos que nos habíamos ido a buscar. Desde ese dia empezamos a salir, era increíble. Estaba viviendo la típica historia de amor, esa que siempre le pasaban a las otras chicas. Lastima que el también, éramos Doña Flor y sus dos maridos. Pero al revés, el amaba a dos, a mi y a las drogas duras. Todo empezó a enfermarse, una locura. Yo intentaba hablarle y el me contestaba desde un cohete a lunares yendo a Júpiter con un Elefante de Capitán, dos enanos y una cebra a cuadros. Chau historia de amor, compañerito, elefante y chau picho. Corazón herido.
Al mes, me entero que no puedo comer mas harinas. Toda una crisis personal ya que soy cocinera de alma y amo comer. Adiós Gluten – Tristeza no tem fin – Estomago herido.
Y si esto fuera poco, no había reunión en que alguien no pusiera el foco del chiste en mi regreso:
- ¿Asi que volviste?, ¡Vuelve el tonto arrepentido!
- Claro, te fuiste corriendo y te paro la cordillera sino te caías al pacifico. Y ahora volves, agárrenla que no se caiga al Atlántico!! . – Paciencia herida.
Igual nada podía conmigo, volvia del taller iluminada por Nelly y sus palabras. No volvia caminado a casa, volvia flotando.
En ese flotar, encuentro una escuela de arte y su cartel en la vidriera decia; “Píntate, tu”. Me quede parada mirando el cartel a través del vidrio y por reflejo de luz me vi a mi. Lo lei de nuevo y lo separé:
- Píntate.
- Tú.
Me rei al verme y solté una frase que me pintaba. Riete de ti.
Desde ese dia, es mi matra y lo recuerdo ante la critica. Cuando me veo, donde me encuentro, me apruebo, me quiero y me sonrió.
- Ríete de ti.
Y de todos, de los que no te quieren, los que no pueden y los que no saben de vos, pero te critican. Míralos a la cara como si un día te levantaras y llevaran un espejo en sus rostros, el reflejo de lo que ellos te digan será tu gesto, entonces riete de ellos, sonríete.
Riete de Ti
*Nelly Vargas Machuca (23/12/1939 - 4/12/2016)
http://nellyvargasmachuca.blogspot.com/

Asi es la casa de libros, la proxima foto es como se ve adentro, obviamente no pude entrar.
Le sigue la casa de Nelly con el cartel de "El Caldero" sobre la pared, ya no existe el taller literario... snif...
Y la escuela de Arte "Pintate Tú" de Ballester, que encontre que aun existe.
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